miércoles, 24 de diciembre de 2014

Caído se le ha un clavel


AL NACIMIENTO DE CRISTO NUESTRO SEÑOR

Caído se le ha un clavel
hoy a la Aurora del seno:
¡Qué glorioso que está el heno,
porque ha caído sobre él!

Cuando el silencio tenía
todas las cosas del suelo,
y coronada de yelo
reinaba la noche fría,
en medio la monarquía
de tiniebla tan crüel,
caído se le ha un clavel
hoy a la Aurora del seno.

De un solo clavel ceñida
la Virgen, aurora bella,
al mundo se le dio, y ella
quedó cual antes florida;
a la púrpura caída
solo fue el heno fiel.
Caído se le ha un clavel
hoy a la Aurora del seno.

El heno, pues, que fue dino,
a pesar de tantas nieves,
de ver en sus brazos leves
este rosicler divino,
para su lecho fue lino,
oro para su dosel.
Caído se le ha un clavel
hoy a la Aurora del seno.

Esta letrilla de Luis de Góngora, escrita hacia 1621, nos sirve para felicitar la Navidad a todos los que se asomen a las páginas de esta bitácora, que está en plena fase de remodelación. El poema los hemos tomado de Luis de Góngora y Argote, Obras Completas, edición de Juan e Isabel Mille Giménez, Editorial Aguilar, Madrid, 1972. Cita de las páginas 393-394.

La pintura que ilustra la entrada se titula Adoración de los Reyes y es obra de Fernando Gallego. En el blog de "Bibliotecas especializadas de Zamora" se nos dice lo siguiente acerca del cuadro: "Esta pintura formaba parte de la colección privada de un financiero asturiano, Pedro Masaveu Peterson, uno de los más importantes coleccionistas españoles del último tercio del siglo XX. En 1994, un año después de fallecer, se conoce la noticia de la dación de 410 obras al Principado de Asturias por parte de sus herederos en concepto de pago de derechos de sucesión. Entre ellas estaba la Adoración de los Reyes, de Fernando Gallego."

sábado, 13 de diciembre de 2014

Vivir en los pronombres


El título de nuestro blog es un verso de La voz a ti debida, uno de los grandes libros de amor de la poesía española de cualquier época, del poeta de la Generación del 27 Pedro Salinas, publicado por Signo, en Madrid, en 1933. "La voz a ti debida" es, a su vez, un verso de la Égloga III de Garcilaso de la Vega. Este es el poema de Salinas:

Para vivir no quiero
islas, palacios, torres.
¡Qué alegría más alta:
vivir en los pronombres!

Quítate ya los trajes,
las señas, los retratos;
yo no te quiero así,
disfrazada de otra,
hija siempre de algo.
te quiero pura, libre,
irreductible: tú.
Sé que cuando te llame
entre todas las gentes
del mundo,
solo tú serás tú.

Y cuando me preguntes
quién es el que te llama,
el que te quiere suya,
enterraré los nombres,
los rótulos, la historia.
Iré rompiendo todo
lo que encima me echaron
desde antes de nacer.

Y vuelto ya al anónimo
eterno del desnudo,
de la piedra, del mundo,
te diré:
"Yo te quiero, soy yo."

Salinas, Pedro, La voz a ti debida  y Razón de amor, Ed. de Joaquín González Muela, Col. Cásicos Castalia nº 2, Editorial Castalia, Madrid, 1989, 210 pp.; cita de las páginas 63-64.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Cervantes y la enseñanza


En una de sus más célebres novelas ejemplares, El coloquio de los perros, Berganza, uno de los perros dotados con la inaudita en ellos capacidad de hablar, el otro es Cipión, acompaña a los hijos de su amo al colegio y se queda en la puerta del aula observando el trabajo de los maestros, jesuitas para más señas, y lo narra de este modo:

Lleguéme al mayor de mis amos, y, a mi parecer, con mucha crianza, se le puse en las manos, y quedéme sentado en cuclillas a la puerta del aula, mirando de hito en hito al maestro que en la cátedra leía. No sé qué tiene la virtud, que, con alcanzárseme a mí tan poco, o nada, della, luego recibí gusto de ver el amor, el término, la solicitud y la industria con que aquellos benditos padres y maestros enseñaban a aquellos niños, enderezando las tiernas varas de su juventud, porque no torciesen ni tomasen mal siniestro en el camino de la virtud, que juntamente con las letras les mostraban. Consideraba cómo los reñían con suavidad, los castigaban con misericordia, los animaban con ejemplos, los incitaban con premios y los sobrellevaban con cordura, y, finalmente, cómo les pintaban la fealdad y horror de los vicios, y les dibujaban la hermosura de las virtudes, para que, aborrecidos ellos y amadas ellas, consiguiesen el fin para que fueron criados.

martes, 2 de diciembre de 2014

Empezar de nuevo


RECONOCIMIENTO DE LA VANIDAD DEL MUNDO

En fin, en fin, tras tanto andar muriendo,

tras tanto variar vida y destino,
tras tanto de uno en otro desatino,
pensar todo apretar, nada cogiendo;

tras tanto acá y allá, yendo y viniendo

cual sin aliento, inútil peregrino;
¡oh Dios!, tras tanto errar del buen camino
yo mismo de mi mal ministro siendo,

hallo, en fin, que ser muerto en la memoria

del mundo es lo mejor que en él se esconde,
pues es la paga dél muerte y olvido;

y en un rincón vivir con la victoria

de sí, puesto el querer tan sólo adonde
es premio el mismo Dios de lo servido.

FRANCISCO DE ALDANA (1537-1578)



NOTA. Como podréis advertir quienes visitéis este blog, después de un tiempo de silencio, hemos vuelto a publicar entradas. La iniciativa parte de un trabajo de investigación sobre la literatura en la red que está llevando a cabo una alumna de 2º de bachillerato. Muy pronto todos los que lo deseéis, podréis dejar vuestras colaboraciones en este blog abierto a todos los alumnos y profesores de nuestro instituto.